martes, 14 de agosto de 2007

Una tormenta e inundaciones dejan tres muertos en el norte de México


Monterrey (México), 14 ago (EFE).- Una intensa tormenta que azotó Monterrey la pasada madrugada dejó un saldo de tres muertos, entre ellos una menor, y de cinco mil afectados, que sufrieron cortes de luz y quedaron varados en sus automóviles, informaron a Efe autoridades de Protección Civil.

Las fuertes lluvias comenzaron cerca de la pasada medianoche, duraron unas dos horas y dejaron anegadas avenidas y desbordados arroyos que cruzan la capital del estado de Nuevo León, en el norte de México, y sus zonas aledañas.

Protección Civil estatal informó de que en el suceso más grave un auto compacto, en el que viajaban tres integrantes de una misma familia, intentó cruzar el arroyo La Cieneguita, del municipio conurbado de Apodaca, y fue arrastrado por el agua.

En ese percance fallecieron la menor Genesis Abril, de poco más de 1 año de edad, y su padre, Juan Antonio Hernández Contreras, conductor del coche, y resultó ilesa otra niña de 7 años, que logró agarrarse a una rama de árbol.

Ambos cadáveres fueron localizados por los cuerpos de socorro en las orillas del arroyo, a la altura de la colonia Metroplex de Apodaca.

El tercer fallecido fue un adulto de entre 30 y 35 años que aún no ha sido identificado, informó Protección Civil.

Sus restos fueron encontrados en el municipio de Escobedo tras ser arrastrados por las aguas.

Las incidencias asociadas con las lluvias abundaron, especialmente los cortes eléctricos.

La portavoz de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Nuevo León, Laura Herria, informó hoy de que decenas de colonias de poniente de Monterrey que quedaron sin luz.

La representante de la CFE estimó que fueron unas cinco mil personas las afectadas por los cortes de energía en sus hogares, la mayoría de la cuales sigue este mañana sin electricidad.

La policía y los agentes de tránsito dieron cuenta de que importantes avenidas del centro de Monterrey quedaron inundadas y que decenas de autos fueron arrastrados por la corriente.

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